Cada vez somos más conscientes de la importancia de protegernos del sol. Pero, ¿por qué no proteger nuestro cabello de la misma manera que nuestra piel? 

El sol promueve la síntesis de vitamina D, esencial para la absorción del calcio en el cabello. También estimula la circulación sanguínea en los vasos que suministran sangre al cuero cabelludo, por lo que el pelo crece más deprisa.

Tendemos a olvidar que nuestro cuero cabelludo también es piel y que, aunque está protegido por nuestro pelo, éste último también sufre los efectos nocivos del sol, al carecer de mecanismos de defensa.

El cabello está compuesto entre un 70% y un 90% por proteínas, 1-9% por lípidos y de 5-10% por agua. Todos estos componentes son afectados por el sol.

Si bien las alteraciones que se pueden sufrir son principalmente estéticas, sí que se pueden desarrollar lesiones malignas en el cuero cabelludo, sobre todo si tenemos pelo muy fino o poco pelo. Estos daños, pueden darse con mayor intensidad en personas que se han realizado decoloraciones, tintes o tratamientos que debiliten el pelo y que alteren su capa de agua y su defensa natural. También, los cabellos más claros, suelen ser los más sensibles.

¿Cómo afecta el sol a nuestro cabello?

• Deshidratación y pérdida de flexibilidad: hace que el cabello se vuelva más áspero, quebradizo y sin vitalidad. Además del sol, el cloro, la sal, la arena, el viento y la humedad afectan al equilibrio del cabello, provocando su deshidratación, decoloración y despigmentación.
• Las cutículas son muy sensibles al calor, alterándose con una exposición prolongada al sol, con pérdida de agua, aminoácidos, lípidos y pigmentos.
• Modificación de la textura: los rayos UV y UVB modifican la textura y la apariencia del cabello.
• Ruptura de las puntas y pérdida del color: el sol es el responsable de la oxidación y formación de radicales libres, lo que hace que se altere la cisteína, aminoácido que constituye la queratina. Esto hace que las puntas se rompan y la melanina se aclare.
• Pelo quebradizo: el cabello se vuelve poroso, seco, sin luz y mucho más quebradizo debido a la deshidratación provocada por el sol.
• Picor: el agua del mar y de la piscina puede hacer que el cuero cabelludo se irrite, teniendo la sensación de picor o quemazón.

¿Cómo funcionan y que beneficios tienen los protectores solares para el cabello?

Son productos que crean una capa de defensa contra el exterior, evitando que la luz solar dañe la cutícula y evitando la pérdida de proteínas y nutrientes. Previenen la resequedad extrema, la fragilidad que la exposición solar prolongada causa y la pérdida de brillo y flexibilidad

Usando un protector solar, evitaremos la destrucción de proteínas del cabello y la foto-oxidación, a la vez que aumentaremos la retención de agua, manteniendo un pelo sano y brillante.

¿Cómo protejo mi pelo del sol?

• Evitar exponer nuestro cabello entre las 12:00 y las 15:00 horas.

• Aplicar el producto antes de salir de casa y cuando llegue el momento de la exposición solar, incidiendo en la raíz y en las puntas. Renovar con frecuencia si la exposición solar va a ser prolongada, para no perder su efecto protector y reparador.

• Utilizar champús, acondicionadores y mascarillas con filtro UV integrado para conservar el brillo y color del pelo.

• Sanear el pelo cortando las puntas y utilizando un tratamiento reparador de puntas para evitar que se abran y se rompan.

• Tomar alimentos ricos en vitaminas C y E así como betacarotenos.

• Beber agua de manera abundante para mantener nuestro cabello hidratado en todo momento.

• Trata de enjuagar el cabello con agua dulce después de cada baño. 

• Nada de plancha y secador.

• Usar gorro o sombrero siempre que se pueda.
• Aplicar por las noches una crema hidratante capilar ya que la arena, el sol, la sal y el viento pueden resecarlo.

Os recomendamos protector capilar…

Para los cabellos expuestos al sol ofrecemos SOLAIRE champú de René Furterer, lava con suavidad y elimina los restos de agua de mar y cloro, reparando el cabello en profundidad y además el 100% de sus activos son de origen natural.

Durante la exposición solar, recomendamos el SOLAIRE Fluido KPF 50+ que previene la deshidratación y aporta suavidad sin apelmazar y si vuestra textura preferida es el aceite SOLAIRE Aceite KPF 50+ que aporta una nutrición intensa y un acabado brillante efecto pelo mojado.

¡Disfruta del verano!